Primer amor

No hay nada que hacer en contra del primer amor
porque el corazón y el estómago virgen sufren el placer
de la primera mariposa que enciende la mecha de la muerte.

No hay nada que hacer en contra de estar a favor
del primer amor porque nunca volveremos a tener esa
sensación de regocijo al llegar a casa y ese placer fetal
en la cama al pensar e imaginar tocando sus pómulos de
calavera blanca.

En las entrañas rojas un beso en los labios rosas, y otro
a través del papel fino que es la frontera del primer amor
consumado.

El brillo de las manos entrelazadas por primera vez en la oscuridad
de la sala de cine.

Carpaccio

estamos envueltos en todo aquello que no somos nosotros por dentro
todo es víscera y carreteras cerebrales y luego fuera el resto en el que se incluye vosotros
la matanza irracional de animal racional
exterior de arte, interior de entraña
trozos de carne solitarios que vagan y se desintegran bebiendo Coca-Cola
la pantalla de la piel es el telón que la separa de la línea fina confetti de milimétricos monstruos transparentes de aire
de ciudad

Estoy escribiendo

Erres de nervios amarillos
Tes de concentración marrón
Comas, azar púrpura
Brujería de jotas negras
Eses sibilinas rosas
Papel mojado de pérdida roja
Susurros de inconsciente azul

AEIOU vocales de saltos
De piedras de río
De franjas de arco-iris

Restas grises, sumas naranjas
Ouija de papel de plata
Árbitro de espacios en blanco
Horizontalidad que vibra verde
Dedos engarzados a un cetro
De plástico transparente
De capucha de monje dorado.

#Horóscopochino

Amasijo de mono
Piel de rata
Orgullo de serpiente
Mirada de perro
Cola de dragón
Tupé de gallo
Coces de caballo
Espalda de buey
Dibujo de tigre
Collar de jabalí
Leche de cabra
Hambre de cerdo

Mujer romana

Soy una mujer romana nunca hablo, cuando lo hago soy un hombre. Expreso aprobación con los ojos odio con los labios amo con las mejillas cruel sin nuez tirabuzaones presa de plata espejo de silencio, sibila sangre sacrificios orificios cintura de reloj de arena fuego sagrado de cristal boca de la verdad. Soy una mujer romana, nunca hablo y cuando lo hago soy considerada un hombre.